No pude dormir en toda la noche pensando en la llamada de Rob, ¿ por qué querría que fuese a su camerino ?, mi cabeza daba vueltas y no era sólo por las copas y el vino de la noche anterior...
Cuando llegué al set de rodaje me dirigí corriendo hasta donde estaba maquillando Norah, la cogí bruscamente del brazo y la llevé lejos de donde nos pudiesen escuchar.
- ¿ Qué tal la cena ? Estuvimos esperando noticias tuyas toda la noche. - me dijo Norah con un tono de enfado que sinceramente me dejó bloqueada, pero no estaba para discutir en ese momento.
- Fue genial, nos reímos, charlamos, nos besamos....-
En ese momento Norah se quedó sin habla... - pero ahora no te quiero comentar eso, anoche me llamó y me dijo que quería que fuese a su camerino, no se qué quiere, me lo imagino pero estoy confusa.-
- ¿ eres virgen ?- me dijo con tono sarcástico.
- ¡No!- lo grité tal alto que algunas personas que estaban pasando por ahí de giraron para mirar....
- Entonces, que es lo que te da tanto miedo.-
- Él es famoso y yo acabo de llegar a este mundo , realmente no se lo que quiere, no quiero ilusionarme y que luego salga mal...-
- No digas tonterías, el es famoso, la verdad que tiene fama de mujeriego, pero anímate y ve allí y si pasa algo deja que pase...-
Sus palabras no me solucionaron mucho las dudas, pero me decidí a ir.
Cuando llegué al camerino él estaba sentado en el sofá tomando un café estaba tan guapo, camisa con algunos botones desabrochados, pantalones vaqueros rotos, zapatos de charol...
En el momento que entré los primero que hizo fue cogerme y empezar a besarme,
- te he echado de menos esta noche- me decía mientras me seguía besando. Intenté frenarle pero no pude, cuando me di cuenta ya me estaba quitando la ropa y haciendo el amor en su sofá de piel...
Estuvimos durante lo que quedaba de rodaje viéndonos a escondidas por mi temor a que se hablará más de nuestra relación que de nuestro trabajo en la película, hasta que llegó el día de el estreno, ese día fue cuando cambió todo...
Pasaron 3 meses desde que empezamos a salir, nadie sabía nada, a excepción de Norah y Joey que estaban encantados de vernos juntos pero se morían de ganas de contarlo.
Llegó el día del estreno, me puse un vestido que me regaló mi madre para que me diese suerte en Los Ángeles, un vestido negro con un gran escote en la espalda y unos zapatos que quitaban el hipo, ese día era mi día y nadie me lo iba a estropear.
Miré el reloj varias veces, Rob me dijo que me iba a recoger para ir juntos al estreno pero no llegaba, en el momento en el que me estaba empezando a desesperar llaman a la puerta, era el chófer de la productor que venía a recogerme, yo les dije que me iba a buscar Rob pero el chofer me dijo que él ya estaba en el teatro donde se iba a estrenar la película, en ese momento no sabía que decir, también pensé que prefería ir sólo así nadie decía nada.
Miraba por la ventana de la limusina y no podía creerme lo que iba a pasar, no me podía creer que en un año haya cambiado tanto mi vida, mi sueño se estaba cumpliendo y hoy era el día que lo iba a ver echo realidad.
Cuando salí del coche se me echaron encima los flashes de las cámaras, periodistas preguntándome, gente gritando y queriendo que le firmase autógrafos, me sentí abrumada, no podía parar de sonreír, al fondo de la alfombra negra vi al señor Jones que venía a darme un abrazo y zafarme de los focos.
-Hoy es tu día querida, disfrútalo.- me dijo dirigiéndome hacia dentro.
No podía hablar estaba en una nube, feliz con ganas de más.
Dentro estaba Rob que me sorprendió pasando de mi olímpicamente, pero extrañamente cariñoso con una chica que estaba a su lado, una especia de " Barbie Malibú ".
- Hola Julia.- me dijo con voz sería y cara de póquer.
- Hola, no es fantástico todo.- le pregunté con emoción, le quise dar un beso pero aparto la cara de manera demasiado brusca.
- Te presento a Estella, mi prometida.-
¿Qué?, me quedé sin habla por un momento pensé que se estaba burlando de mi pero en ese momento ella me enseñó el pedrusco que llevaba en la mano, no me lo podía creer, me sentía engañada, el día más feliz de mi vida se había convertido en una pesadilla.
Me fui andando hacia el baño, no corrí ni monté ningún espectáculo, mi madre me enseñó muy bien a controlar los sentimientos.
Cuando salí allí estaba Rob con cara de no haber roto un plato en su vida.
-Pensé que sabías lo de Estella.-
-No, no lo sabía-
-Rompimos hace unos meses pero hace 4 meses volvió y la pedí casarse conmigo-
En ese momento me empezaron a caer las lágrimas , no me lo podía creer me había convertido en su amante, no quería estar en ese momento allí.
-No quiero saber nada de ti, me has engañado y has engañado a tu novia, yo no puedo ser " la otra "-
En ese momento me di media vuelta y me dirigí al vestíbulo dejando a Rob detrás mirándome, pero yo no quise mirar atrás, nunca más.
CONTINUARA...
No hay comentarios:
Publicar un comentario